Económicos y accesibles, los manteles individuales se han vuelto muy comunes en restaurantes y cafeterías como así también en el hogar. Ayudan a mantener el orden y la limpieza de la mesa y a su vez la visten con elegancia.

El mantel es el principal elemento de cualquier mesa, pero la mayoría de la gente evita su uso ya que suele ensuciarse mucho y es necesario lavarlo con frecuencia. Es por ello que los manteles individuales cobraron tanto protagonismo: reemplazan a los manteles comunes con alegría y permiten cambiar de estilo con facilidad variando entre las interesantes posibilidades que nos ofrece el mercado. Además son más prácticos a la hora de limpiar y guardar.

Para comer cómodamente en un individual debe tener las dimensiones adecuadas para que entren el plato, los cubiertos y el vaso. Generalmente sus medidas son de 30×50 cm.  y, por nombrar algunas de sus variedades, los encontramos en ecocuero, cuero, plástico, hule, ratán, tela, esterilla, madera, etc.

Los podemos encontrar en bazares, ferias, supermercados o casas de diseño, sólo nos queda decidir cual es el que más nos gusta.

Escrito por Cecilia Favier de Decocasa

Fuente Imágenes: Anouk, Miss Compras